Hoy os hablamos de una boda muy especial para Love Story que seguro os inspira a aquellas que deseéis celebrar vuestro enlace junto al mar. Menorca fue el escenario elegido para organizar esta boda al aire libre, con espíritu mediterráneo y mucho encanto.
El equipo de Love Story fuimos los encargados de diseñar y organizar todo lo necesario para disfrutar de un día inolvidable: desde los distintos espacios, hasta el menú ó la decoración floral, sin olvidar, por supuesto, las invitaciones y otros muchos detalles. Todo ello hizo que el resultado no pudiera ser mejor…
La noche previa al gran día, puesto que la mayor parte de los invitados habían tenido que desplazarse hasta la isla, celebramos una divertida cena de aire informal en una preciosa casa con vistas al Puerto de Mahón. Diversas estaciones de Showcooking, música a cargo de un Discjockey y todos los invitados vestidos de blanco fueron las notas que hicieron que la noche fuera el comienzo de la gran celebración que tendría lugar al día siguiente.
Al día siguiente tenía lugar la ceremonia, celebrada en la Ermita de Fátima, un pequeño templo situado en lo alto de una colina. Un lugar íntimo y especial perfecto para celebrar una boda con ese toque tan personal que buscaban los novios.
El novio lució pajarita y la novia un precioso velo acorde con su ramo de rosas en tonos románticos.
Mientras los invitados aguardaban en la iglesia, la novia llegó en un original coche descapotable amarillo, totalmente integrado con el entorno, haciendo un guiño a ese toque tan especial que los novios querían que fuera su enlace.
Ya sabéis cómo nos gustan en Love Story los detalles. Como estas velas en uno de los rincones de esta preciosa ermita.
Sin duda fue una boda muy romántica y emotiva, con ese aire íntimo que rodea las bodas que se celebran en una pequeña ermita.
Las bonitas fotos de recuerdo del enlace fueron obra del fotógrafo Jorge Fuembuena, habitual colaborador de Love Story.
Sobre una montaña también se encuentra la finca en la que se celebró el banquete y la posterior fiesta. Una preciosa casa aristocrática situada en un entorno bucólico y muy coqueto.
No podía faltar el brindis con los invitados, con el mar como invitado de excepción.
La zona ajardinada sirvió para disfrutar de un aperitivo que hizo las delicias de los asistentes, servido por Catering S´Algar ¡Un gustazo trabajar con ellos!
Para la cena, que tuvo lugar en el porche, escogimos suculentos platos con sabor mediterráneo en cada detalle.
Y tras la cena…El baile. Un broche de oro perfecto a una boda de ensueño frente a las azules aguas del mar menorquín.
Otra Love Story que comienza ¡Enhorabuena chicos!